Una noche en la que la lluvia puso a prueba al gigante de Cosquín

TERCER LUNA  POR LUCIANO BARRIGON

La tercera luna del Festival Nacional de Folklore de Cosquín comenzó con la magia de la poesía. «Los poetas que cantan» abrieron la velada con un poema leído por Miguel Vera, seguido del tradicional grito y la presentación del ballet, que marcaron el inicio de una jornada que prometía ser inolvidable.

El chamamé fue el encargado de abrir la noche con la presentación de Los Alonsitos, quienes celebraron sus 40 años de trayectoria musical. Hasta ese momento, la velada transcurría con algunas gotas dispersas, pero el público seguía firme en sus lugares.

Sin embargo, el turno de Los Guitarreros marcó el momento más complicado de la jornada, cuando la lluvia se volvió incontrolable. La Plaza Próspero Molina, símbolo de la resistencia folklórica, se vació parcialmente, y la comisión organizadora decidió suspender momentáneamente el espectáculo para garantizar la seguridad de los presentes.

Tras unos minutos, la lluvia disminuyó, aunque no se detuvo completamente, dejando su marca en la programación. Daniel Espoz, ganador del PreCosquín como solista masculino de malambo, no pudo realizar su presentación debido a las condiciones climáticas, y su actuación fue pospuesta. Además, algunos desperfectos técnicos afectaron el sonido durante varias presentaciones, como la de Facundo Toro, obligando a cambiar repertorio para continuar el show.

A pesar de las adversidades, el espíritu del folklore se mantuvo firme. La joven cantante Magui Cullen fue la encargada de retomar la noche, enfrentando la lluvia con su dulce voz y alentando al público a quedarse, Al gigante del folklore no lo frena un par de gotas.

La cordobesa Camila Pino, ganadora del PreCosquín como solista vocal, siguió sorprendiendo al público con su talento, mientras que Facundo Toro, uno de los artistas más esperados de la noche, demostró por qué el folklore corre por sus venas. Acompañado por un público que se las ingenió con paraguas, bolsas y cartones para resistir, Facundo brindó un show memorable, con invitados de lujo como Los Caligaris, Manolo Herrera, Los Sachaguitarras Atamishqueñas y la destacada Eugenia Quevedo.

La música cuyana tuvo su espacio con Los Videla, mientras que la banda local Ceibo, una de las más queridas por el público coscoíno, celebró sus 10 años de trayectoria con un reconocimiento especial.

El grupo Destino San Javier llevó la fiesta y la nostalgia al escenario, con un repertorio que hizo bailar y cantar a la plaza. La noche tomó un giro especial con la participación de Los Tekis, quienes interpretaron Amor fugaz junto a ellos, en un momento que marcó la antesala del gran cierre.

Finalmente, Jujuy se adueñó del escenario con el carnaval de Los Tekis, quienes celebraron 30 años de carrera. Bailes, alegría y emociones se apoderaron de la plaza cuando invitaron a Destino San Javier y Facundo Toro a compartir el escenario para un cierre inolvidable. La presentación tuvo un tono especial, ya que fue la última vez que Juanjo Pestoni, percusionista de Los Tekis, estuvo en el festival, tras anunciar su retiro para dedicarle más tiempo a su familia.

A pesar de que la lluvia fue un desafío constante, los artistas y el público demostraron que el amor por el folklore trasciende cualquier obstáculo. La tercera luna quedará en el recuerdo como una noche de entrega, resistencia y pasión en cada presentación. 🌙🎶