Alberto Fernández en Israel participa junto a 30 presidentes del homenaje a las víctimas del Holocausto

Alberto Fernández participa junto a una treintena de jefes de Estado de los homenajes por el quinto Foro Mundial Mundial del Holocausto, en Jerusalén, a 75 años de la liberación del campo de exterminio de Auschwitz-Birkenau.

Luego de desayunar junto al gobernador Axel Kicillof, el Presidente partió del hotel King David antes del mediodía junto a todos los int antes del mediodía rumbo al Yad Vashem, el imponente Museo del Holocausto que alberga esta ciudad, custodiada por un monumental operativo de seguridad.

Los primeros oradores del acto serán el presidente israelí Reuven Rivlin y el primer ministro Benjamin Netanyahu, con quienes Fernández mantendrá encuentros bilaterales el viernes.

Luego, hablará el presidente del Foro, Moshe Kantor. Luego de una interpretación de la orquesta internacional Yellow Stars, será el turno del presidente ruso Vladimir Putin, quien -se esperaba- podría tomarse una foto significativa con el mandatario argentino. Putin inauguró allí un memorial por el sitio de Leningrado.

Tras un disurso breve del jefe del Kremlin, hablará el vicepresidente de los Estados Unidos Mike Pence. El francés Emmanuel Macron, que el miércoles conversó informalmente con el Presidente -se verán en París el 5 de febrero- sigue en la lista. El presidente alemán Frank-Walter Steinmeier será el último jefe de Estado en hablar.

También se esperan testimonios de sobrevivientes del holocausto. A las 16.30, los presidentes colocarán ofrendas florales en homenaje a las víctimas del Holocausto.

En la antesala del acto central, el Presidente se saludó con el vice Donald Trump, Mike Pence. Cerca del mandatario afirman que Washington no obstruirá el acuerdo con el FMI.

Fernández se saludó también con el rey Guillermo Alejandro de los Países Bajos. El presidente y el esposo de Máxima Zorreguieta ya habían dialogado la noche anterior en la recepción oficial.

Fernández regresará entonces al hotel, donde tiene previsto recibir por la noche a familiares de desaparecidos durante la última dictadura, quienes le pedirán que intervenga ante las autoridades israelíes para que Jerusalén abra los archivos sobre esos años.