Alberto Fernández se reunió con Héctor Daer para tratar de contener a la CGT en la discusión paritaria

Héctor Daer tuvo más suerte que Hugo Moyano: consiguió que Casa Rosada «libere» la foto de su encuentro con Alberto Fernández, algo que el camionero no tuvo aunque, a priori, tampoco lo solicitó con la intensidad que sí lo hizo el jefe de la CGT.

El cegetista, un sindicalista de fluida relación con el Presidente, se ha ganado -en público y privado- elogios de Fernández con quien se conocen hace tiempo. Hablan seguido y este jueves, tuvo almuerzo, charla, confidencias y foto en la Casa Rosada.

Eso sí: en el universo gremial nadie pasó por alto que Fernández había priorizado, el martes, reunirse con el camionero Moyano. El camionero, de mayor poder de fuego, tiene juego propio por afuera de la CGT

Daer forma parte de un circuito que prefijó Fernández y apunta a interactuar con los jefes sindicales para reforzar la empatía política y, a la vez, pedirle que «lo ayuden» con negociaciones paritarias moderadas para no sumar tensión a la cuestión inflacionaria.

No hay fecha ni agenda pero en la Casa Rosada se anticipa que habrá una escala con la CGT, la mesa más grande del dispositivo sindical, pero de la que no intervienen, hace largo tiempo, el moyanismo y sectores como La Bancaria de Sergio Palazzo.

Fernández y Daer encontraron, en la semántico del poder, una síntesis: que los gremios busquen el equilibrio de «no perder poder adquisitivo» pero sin generar «cimbronazos que se vayan a precios». La Rosada busca contener las discusiones paritarias

La charla, almuerzo incluido, tuvo un contexto: ocurrió unas horas antes de que el INDEC difunda el índice de inflación de enero, que fue 2,3%. 

Fernández decidió ponerse al frente de las charlas con los jefes gremiales. Además de a Moyano y ayer a Daer, seguirán los encuentros y habrá, más temprano que tarde, una juntada con la mesa de la CGT.

Daer expuso, en la charla, un enfoque sobre la «clausula gatillo», mecanismo que Fernández pidió excluir de las paritarias para «desindexar» la economía. Según el titular de la CGT y dirigente de Sanidad. ese formato tiene poco alcanza: solo hay 11 convenios nacionales con «clausula gatillo» le detalló a Fernández.

Uno, según supo Clarín, es Sanidad, otros son UOCRA y SMATA. El gobierno pide que no continúen y los gremios están dispuestos aunque dan por hecho que en muchos acuerdos se incluirán cláusulas de revisión.

Fernández y Daer analizaron que el mapa sindical es heterogéneo y que resulta muy dificil establecer un único esquema de paritarias porque depende cómo fueron los acuerdos anteriores de cada gremios y la situación de los sectores.

Según contó el propio Daer a la prensa tras el almuerzo, el Presidente se interesó por «cómo se va a ir llevando este tramo de negociación que estamos teniendo los gremios, que somos absolutamente responsables» y conscientes «sobre la situación que estamos viviendo».

​El sindicalista también sostuvo que «La baja en la inflación que está prevista y que parece que se está materializando va a ayudar mucho en lo que nosotros pretendemos, que es que no se siga erosionando el salario. Todo es parte de una misma conversación».

Hace dos semanas, en la primera reunión de la mesa chica cegetista, se había acordado que todos los gremios tienen autonomía para negociar sus paritarias. Aquella vez hubo rechazo unánime a continuar con el esquema de las sumas fijas.

Claudio Moroni, el ministro de Trabajo, sigue al tanto de las gestiones y este jueves pasó por la Casa Rosada para reunirse con el jefe de Gabinete Santiago Cafiero y el titular de la ANSeS, Alejandro Vanoli, sobre los anuncios de aumentos para jubilados y AUH.

En la charla con el jefe sindical, Fernández también habló de su gira por Europa y se mostró confiado por la renegociación de la deuda.

Daer, por su parte, habló al salir de la Casa Rosada. «La baja en la inflación va a ayudar mucho en lo que nosotros pretendemos, que es que no se siga erosionando el salario. Todo es parte de una misma conversación» dijo.

«(La baja) va a permitir tener una recuperación mucho más progresiva y efectiva porque los procesos inflacionarios son como decía (Juan Domingo) Perón, cuando los precios van por el ascensor y los salarios por la escalera y tardan mucho en llegar», completó.