Este Domingo siendo las 21:30 horas, mientras dos dotaciones de bomberos se encontraban abocadas a la extinción de un incendio forestal, una unidad de rescate fue movilizada de urgencia hacia un domicilio en el Barrio La Toma. El motivo del desplazamiento fue la presencia de dos menores que habrían sufrido convulsiones, generando preocupación en la comunidad.
Al llegar al lugar, los equipos de emergencia evaluaron el estado de los menores y, ante los síntomas presentados, se decidió enviar una dotación adicional equipada con instrumentos para la medición de gases. El objetivo era descartar la posible presencia de monóxido de carbono en el ambiente, un gas inodoro y potencialmente mortal.
Tras realizar las mediciones correspondientes, se confirmó que no había concentraciones peligrosas de monóxido de carbono en el domicilio, resultando las pruebas negativas. Los menores recibieron la atención necesaria, y la situación quedó bajo control, destacándose la rápida y eficiente intervención de los equipos de rescate en tareas tanto de asistencia como de prevención.