El aumento anual, en comparación con el mismo período del año anterior, se disparó hasta alcanzar un alarmante 276,2%. Este índice de inflación afecta directamente el poder adquisitivo de los ciudadanos y genera un contexto de incertidumbre económica.
Entre los rubros que más contribuyeron a este aumento se encuentra el de las telecomunicaciones, con un incremento del 24,7%, seguido de cerca por las tarifas del transporte, con un 21,65%. También se destacan los aumentos en los servicios básicos como electricidad, gas y agua, así como en los combustibles, con un 20,2%.
En cuanto a la composición de la inflación por divisiones, el rubro de Alimentos y bebidas no alcohólicas tuvo la mayor incidencia, con un aumento del 11,9%. Dentro de esta categoría, se destacan las subas en productos como carnes y derivados, pan y cereales, así como leche, productos lácteos y huevos.
Por otro lado, las divisiones que experimentaron las menores variaciones durante febrero fueron Recreación y cultura, con un aumento del 8,6%, y Prendas de vestir y calzado, con un 7,2%.
Estos datos evidencian la compleja situación económica que enfrenta el país, con una inflación que impacta en todos los sectores de la sociedad y pone a prueba las políticas gubernamentales en materia económica.