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«Lo va a ubicar Axel (Kicillof)«. Con esta premisa, en el Gobierno buscaron bajarle un tono a la polémica y evitaron contestarle a Sergio Berni. Pero la reacción del ministro de Seguridad bonaerense, quien advirtió al Presidente que «nadie es dueño de la verdad absoluta”, no cayó nada bien en la Casa Rosada porque recalentó una interna en un área clave a pocos días de haber arrancado el nuevo Gobierno. En el oficialismo confían en que será el gobernador Axel Kicillof quien logrará «ubicar» al funcionario.
«No vamos a responderle», fue el mensaje casi al unísono que esbozaron en el entorno presidencial, en un intento por poner fin a la discusión mediática, ya que -consideran- que la actitud crítica del ministro de Seguridad provincial hacia su par de Nación, Sabina Frederic, no hace más que «alimentar a la oposición».
En rigor, en el Gobierno esperaban poner fin a la polémica el domingo, cuando Alberto Fernández se metió en la interna y le marcó un límite tras las críticas a Frederic: «Sería bueno que se ocupe de la provincia de Buenos Aires, que tiene muchos problemas para resolver, básicamente», recomendó en una entrevista al sitio «El Cohete a la Luna», al ser consultado sobre los fuertes cuestionamientos que Berni le hizo a Frederic.
«Sabina expresa exactamente lo que yo creo que hay que hacer en materia de seguridad. Cuenta con todo mi aval, con todo mi apoyo y estoy seguro que está en la senda correcta y el resto son opiniones de alguien», fue el respaldo del Presidente a su ministra.
Alberto Fernández y Sabina Frederic, juntos en Casa Rosada.
Pero este lunes Berni redobló la apuesta y desafió directamente al Presidente. En diálogo con La Red, indicó que «nadie es dueño de la verdad absoluta» y aclaró: «Me dedico permanentemente a la provincia e intento hacer lo mejor, desde una mirada profesional, no desde una mirada caprichosa o ideológica».
A sabiendas de que Berni tenía previsto participar de la reunión de Gabinete que encabezó Kicillof en La Plata, pese al impacto que generaron sus dichos, en Balcarce 50 bajaron línea a los funcionarios nacionales de no responderle. «Ya lo va a ubicar Axel (Kicillof)», afirmaron.
Según pudo saber Clarín, en ese encuentro Kicillof no expuso a su ministro a un intercambio sobre el tema. Aunque en la gobernación admiten que podría haber una charla entre ambos.
En el Gobierno, a pesar de la orden de no responderle públicamente, hay funcionarios muy enojados con Berni. Y, en consecuencia, por lo bajo se escuchan frases contundentes contra el ministro. «Queremos que labure más y esté menos en los canales de televisión«, fue la reflexión de un alto funcionario.
Incluso, según pudo saber este diario, varios intendentes bonaerenses enviaron mensajes de apoyo a Alberto F. y al propio Kicillof, en sintonía con la orden que había enviado el Presidente. «Tiene que bajar al territorio y dejar de armar quilombo«, estalló -ante este diario- uno de los jefes comunales que admitió haberse solidarizado con los mandatarios. Hubo otros más enojados que recurrieron a insultos para referirse a la actitud del ministro.
Las críticas de Berni, consideran en el Gobierno, incentivó a referentes de la oposición en materia de Seguridad para cuestionar a Frederic. «El puso el tema en la agenda y después salieron (Patricia) Bullrich y (Miguel) Pichetto», repasaron.
Es que este lunes, minutos después de la réplica de Berni al Presidente, Bullrich advirtió que “no se puede manejar la seguridad de un país en medio de la hostilidad entre ministros”. «Los que sufren la discusión de la política son los ciudadanos», remarcó en A24.
Y Pichetto apuntó directamente a Frederic: «La seguridad en manos de esta señora antropóloga es algo muy malo y peligroso. La visión esta ideológica progresista destruye y hace débil al país», cuestionó en radio Con Vos.
Aunque se reavivó en las últimas horas, la polémica arrancó semanas atrás, cuando el ministro de Kicillof calificó de “disparate” la decisión de Frederic de desestimar el uso de esas armas y la acusó de «nunca» haber estado «con un arma por la 9 de Julio con 200 personas esperando cruzar un semáforo». Frederic, por su parte, no se quedó callada y le contestó que «el tampoco anduvo con una pistola en la mano en la avenida 9 de Julio».
En el medio, la semana pasada se reunieron por primera vez y acordaron trabajar en conjunto para reforzar la presencia de fuerzas federales en territorio bonaerense. La paz duró poco.
Frederic y Berni, juntos el jueves pasado, en el Ministerio de Seguridad.
En cumplimiento con el pedido del Gobierno, voceros de Frederic aseguraron que no van a contestarle más a Berni. En efecto, en Casa Rosada entienden que el duelo va más allá de la funcionaria: «El problema que tiene es que quiso ser ministro nacional y ni Alberto ni Cristina le dieron bola», graficaron.
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