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La Cámara Federal porteña suspendió hoy su atención presencial y resolverá todos los asuntos que se presenten de manera remota, a la espera de los resultados de la prueba de coronavirus realizada a uno de sus integrantes, Mariano Llorens.
Llorens quedó internado en el sanatorio San Lucas, del partido bonaerense de San Isidro, tras presentar fiebre alta con un diagnóstico de neumonía bacteriana pero se está a la espera del resultado definitivo de la prueba del Covid-19, explicaron fuentes judiciales.
Ante ello, «por precaución y hasta que finalicen los estudios», sus compañeros del Tribunal de Apelaciones resolvieron al menos por hoy realizar teletrabajo y cerrar el segundo piso de los tribunales federales de Retiro, donde tiene sede la Cámara.
Una vez que se conozca el resultado del estudio hecho al camarista, se resolverán los pasos a seguir.
Llorens concurrió al edificio de Comodoro PY 2002 hasta el 17 de marzo pasado.
El juez que integra la Sala primera del Tribunal quedó internado ayer por un cuadro de neumonía bacteriana y se encuentra en buen estado general, a la espera de los estudios y ya bajo tratamiento -en principio- por ese cuadro.
La Cámara Federal, instancia intermedia de apelación del fuero, había dispuesto desde el inicio del aislamiento obligatorio y con el dictado de la feria judicial extraordinaria por parte de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, el trabajo con guardias mínimas.
Desde esta semana sólo concurrieron a Comodoro Py 2002 dos jueces por ambas salas de apelación y un secretario.
Ante la internación del juez y por precaución sus colegas Martín Irurzun, Leopoldo Bruglia y Pablo Bertuzzi optaron por suspender la concurrencia física al edificio.
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