El costo de mantener a un niño en Argentina experimentó un incremento de aproximadamente un 4% en octubre en comparación con el mes anterior. Este aumento refleja las dificultades que enfrentan las familias para hacer frente a los gastos de crianza en un contexto de inflación constante.
De acuerdo con los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), los hogares necesitaron entre $381.230 y $479.723 para cubrir los gastos de un niño, dependiendo de su edad. Estos valores ponen en evidencia el desafío financiero que representa la crianza de un hijo en el país.
Para los hogares con un bebé menor de un año, el costo mensual se ubicó en $388.184, lo que representa un aumento del 4,96% en comparación con septiembre. De este total, $111.749 se destinaron a bienes y servicios, mientras que los costos de cuidado alcanzaron los $276.435.
Las familias con niños de entre 1 y 3 años necesitaron $460.220 mensuales, registrando un aumento del 4,86%. De esta cifra, $144.294 se destinaron a bienes y servicios, y $315.926 correspondieron a los gastos relacionados con el cuidado.
El gasto para niños de 4 a 5 años ascendió a $381.230, lo que implicó un incremento del 4,21% con respecto al mes anterior. De este monto, $183.776 se utilizaron en bienes y servicios y $197.454 se asignaron a los costos de cuidado.
Finalmente, para los niños de entre 6 y 12 años, el gasto mensual alcanzó los $479.723, lo que representa un aumento del 4,22% en relación a septiembre. Esta cifra se dividió en $227.975 para bienes y servicios, y $251.748 para el cuidado.
El análisis detallado de los datos muestra que los aumentos más significativos se produjeron en los costos de cuidado, superando a los incrementos en bienes y servicios. Esta tendencia subraya la carga económica que suponen las tareas de cuidado, que en muchos casos no reciben una remuneración.
La canasta de crianza, presentada por el INDEC en marzo de 2024, busca cuantificar los gastos asociados a la crianza de niños y adolescentes de hasta 12 años. Esta herramienta incluye el cálculo de gastos en alimentación, vestimenta, vivienda, transporte y salud, además de los costos de cuidado basados en la categoría de «Asistencia y cuidado de personas» del régimen de trabajo de casas particulares.
Con esta iniciativa, se pretende visibilizar los costos vinculados a las tareas de cuidado, las cuales han sido históricamente no remuneradas. Además, la canasta de crianza sirve como referencia en procesos judiciales para el establecimiento de cuotas alimentarias, contribuyendo a una mayor comprensión de las necesidades económicas de los hogares con niños.