La Copa con la que sueñan todos

Aunque sabe de categorías, de presupuestos y de cantidad de hinchas, hay un torneo que los iguala a todos. A la hora de apoyar la cabeza en la almohada, todos sueñan con lo mismo: el título y la clasificación a la Copa Libertadores. Ayer se sorteó la Copa Argentina y en ese acto que parece intrascendente se dieron momentos únicos para los humildes clubes que vieron cómo el bolillero les deparaba jugar contra Boca, River o los otros equipos más populares de nuestra tierra. Quién les quitará lo bailado a los de Claypole o Defensores de Pronunciamiento, que saben que en el primer semestre tendrán el partido más importante de sus historias. Las copas nacionales se juegan desde el 1900, ya se han disputado 104 ediciones y luego de un bache bastante grande en la historia de la AFA -entre 1970 y el 2010, con la salvedad de la Copa Centenario que Gimnasia ganó en enero de 1994-, la Copa Argentina volvió para quedarse y para meterse en el corazón del pueblo futbolero. Ya está en marcha la novena edición consecutiva y los 64 equipos que llegaron a la fase final saben lo difícil que es consagrarse, pero tienen claro que un día te podés convertir en héroe y das el gran golpe, como ya les sucedió a Real Pilar, Sol de Mayo, Almagro y Estudiantes de Caseros el año pasado…

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“En la Copa Argentina puede pasar cualquier cosa”, dice el slogan publicitario del torneo. Y en ese espíritu está la impronta de un certamen que atrapa, que tiene siempre en vilo a todos y que recobra las historias de los laburantes del fútbol, los que están lejos de las súper estrellas y que un día se encuentran marcando a Pratto, y al otro están atendiendo la panadería. Es verdad que River ganó tres de las últimas cuatro ediciones, pero también es cierto que Atlético Tucumán y Central Córdoba de Santiago del Estero jugaron la primera final de sus vidas. Y eso es lo lindo que tiene la Copa Argentina…

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