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Los precios de los alimentos tuvieron una fuerte suba en enero, del 4,7 por ciento en promedio según el Indec, mientras que en lo que va de febrero se verifican nuevos incrementos en carnes y lácteos y estabilidad en panificados. En líneas generales, se estima que la inflación en bienes básicos durante este mes quedará por debajo del salto de enero. Los factores que juegan para determinar en dónde se van a ubicar los precios de los alimentos son los siguientes: el componente de recomposición del IVA que todavía no fue aplicado en enero, el impacto de las subas diarias en la cotización del dólar y, en sentido contrario, el efecto estabilizador del programa Precios Cuidados.
“Las mediciones de las dos primeras semanas del mes marcan que la dinámica de los precios en alimentos viene por debajo del número de enero, que fue muy alto. Hay que ver cómo sigue impactando la restitución del IVA, porque todavía queda algo por trasladar, y también otro tema es el efecto en precios del crawling peg que viene llevando adelante el Banco Central, o sea la estrategia de ir subiendo de a poco la cotización del dólar”, explicó a este diario Martín Vauthier, economista de Eco Go.
Para Elypsis, la inflación general se ubicó en el 0,4 por ciento en la primera semana de febrero, “la primera aceleración en cinco semanas”. La proyección para todo el mes es de una inflación del 2,5 por ciento, inferior al 3,2 que asignó a enero –aunque el Indec midió una suba general de precios del 2,3 por ciento el mes pasado–. En el caso de alimentos y bebidas, la consultora midió una suba de precios del 0,4 por ciento, frente al 0,1 por ciento de la última semana de enero. Alimentos subió 0,4 y bebidas, 0,6.
En el sector de la carne, “en febrero la media res aumentó unos 6 ó 7 pesos (por kilogramo), estábamos pagando 194 pesos y ahora 202 o 203 pesos», explicó Alberto Williams, de la Asociación de Propietarios de Carnicerías. “No se encuentran muchos motivos para explicar esta suba (del orden del 4%), porque no hay más ventas, no subió la nafta, la gente está de vacaciones y hay caída de exportaciones por la situación en China”, agregó. En enero, el Indec calculó que el kilo de asado subió un 11 por ciento; la carne picada lo hizo en un 13 por ciento; la nalga, 5,5 y el pollo, 4,4 por ciento.
El 28 de enero, Molinos Río de la Plata envió a la red de comercios y supermercados a quien les vende su lista de precios, que incluyó entre otras cosas una baja del 11 por ciento en los fideos La Favorita y Luchetti. Según fuentes del mercado, la empresa bajó precios en esas marcas para no perder mercado frente a Canale y Matarazzo (que también son propiedad de Molinos), las cuales participan del programa Precios Cuidados. También bajó los precios del pan rallado Preferido y Luchetti, aunque subió los valores de las tapas de tartas y empanadas La Salteña. Por el contrario, las empresas de lácteos enviaron listas con aumentos del orden del 8 por ciento y también subieron de precio los fiambres. En enero, el Indec midió una suba promedio del 5,8 por ciento en fideos, 8,7 por ciento en aceite de girasol y 7,9 en la leche entera fresca en sachet.
Desde la industria molinera indicaron que “desde enero, el trigo aumentó un 21 por ciento y la harina industrial, un 13 por ciento, aunque todavía está por debajo de los valores de octubre de 2019”. Agregaron que “en lo que va de febrero, el trigo aumentó 20 dólares y la harina en 150 pesos la bolsa”. Desde las panaderías afirman que el precio del pan está estable a partir de un acuerdo de precios a nivel sectorial.
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