https://images.pagina12.com.ar/styles/focal_16_9_960x540/public/2020-12/127869-whatsapp-20image-202020-12-15-20at-2018-56-10.jpeg?itok=X1rorXe4
El coronavirus causó una crisis inédita. La mitad de los hogares tuvo una reducción en su ingreso total. El 40,3 por ciento tuvo al menos un miembro con problemas laborales, como un despido, suspensión o disminución de ingresos. Además, 1 de cada 3 familias redujo el consumo de al menos un alimento, en su mayoría carne vacuna.
Así se desprende de un estudio especial que realizó el Indec sobre el impacto del coronavirus en los hogares del Gran Buenos Aires (la Ciudad y los 31 partidos del conurbano) para los meses de agosto-octubre de este año, finalizada la cuarentena más estricta en el AMBA.
En este contexto, las familias llevaron a cabo distintas estrategias. El 11 por ciento de los hogares consultados solicitaron un préstamo, el 28,6 por ciento dejó de pagar los servicios de la vivienda y el 45,8 por ciento redujo el consumo de productos no alimentarios.
Todos estos datos se dan teniendo en cuenta que casi tres cuartos de los hogares relevados recibían alguna prestación social implementada por el Estado. En el 24,6 por ciento de los mismos previo a la pandemia, el 26,8 por ciento previo y durante la pandamia y el 21,2 por ciento tuvo acceso a alguno de los beneficios durante la pandemia, como el IFE o el ATP.
Números
Empleo. El impacto fue mayor en los hogares con jefes de menor nivel educativo (hasta secundario incompleto): 45,7 por ciento. En cambio, en los hogares cuyos jefes tienen un nivel educativo de terciario/universitario completo, el 34,5 por ciento se vio afectado. Además, también varió según la situación geográfica. En los partidos del conurbano bonaerense, los problemas de empleo alcanzaron al 42,6 por ciento de los hogares; mientras que en la CABA, se vio afectado el 33,6 por ciento.
Ingresos. El 49,3 por ciento de los hogares que participó de la encuesta manifestó haber tenido una caída en el monto total de sus ingresos respecto a la situación previa a la pandemia. Teniendo en cuenta el nivel educativo del jefe de hogar, se observa que en los hogares con menores niveles de instrucción, la proporción que experimentó una reducción en sus ingresos fue mayor (57,1 por ciento). En cambio, en los hogares con al menos una persona menor a 18 años, la pérdida de ingresos alcanzó al 57,3 por ciento.
Hábitos alimenticios. Un 33,8 por ciento de los hogares relevados declaró que se vio en la necesidad de reducir por razones económicas el consumo de al menos un alimento, ya sea carne vacuna, otras carnes, verduras frescas o leche. En los hogares con presencia de niños, la cifra llego al 42,7 por ciento.
Del universo del total de hogares que manifestaron haber reducido el consumo de alimentos, aquellos que señalaron que lo hicieron para uno solo, representan el 50,2 por ciento, y casi en su totalidad (87,4 por ciento), corresponde a la reducción en el consumo de carne vacuna.
De hecho, el consumo de carne se encuentra en mínimos históricos, mientras que las exportaciones siguen aumentando, al igual que los precios. En noviembre, la carne subió 5,4 por ciento en el Gran Buenos Aires, y acumula en el año 37,8 por ciento, por encima del índice general (29,3 por ciento), según los últimos datos del Indec.
Los cambios en los hábitos alimenticios se dan pese a que el 83,8 de las familias recibe algún tipo de asistencia estatal. El 25,4 por ciento recibe al menos una de las prestaciones sociales por la pandemia, otro 36 por ciento anterior y durante el coronavirus, un 19,4 por ciento accede solo a alguna de las prestaciones previas, y el 3 por ciento de los hogares solo accede a asistencia alimentaria no monetaria.
[ad_2]
Fuente
Más historias
Una familia tipo cordobesa destinó hasta el 63% de su ingreso a la alimentación en octubre
La canasta de crianza aumentó 4% en octubre
El salario mínimo quedó por debajo de la canasta básica en octubre de 2024