El pasado 15 de febrero, Melina Anahí Luna, fue asesinada de 46 puñaladas frente a su beba de un mes, por su pareja y padre de sus hijas, César Matías Carranza.
Él se encuentra actualmente imputado por homicidio doblemente calificado por el vínculo y por violencia de género. Cuando comenzamos a actuar desde el Estudio Murua y Asociados como querellantes en la causa, constatamos que las menores se hallaban sin guarda judicial, ya que la SENAF no actúo en el momento del femicidio.
En caso de haber intervenido oportunamente hubiera tomado una medida de Tercer Nivel y el Juez mediante control de Legalidad le hubiera confirmado la Guarda, y las gestiones hubieran sido mucho más ágiles, ya que tomando una medida del tercer nivel (Ley 9944 Art.48) para que el juez después haga el control de legalidad respectivo y le confirme la guarda judicial a la hermana de Melisa, las menores no habrían quedado desprotegidas legalmente.
Gestionamos civilmente y de urgencia la guarda en favor de la tía de las pequeñas y a partir de allí, en ANSES iniciamos los trámites para que obtengan los beneficios de la Ley Brisa. Esta establece una reparación económica para los hijos de progenitores víctimas de violencia familiar o de género, y les reconoce el derecho a cobrar una suma mensual y a tener cobertura de salud.
Uno de los requisitos para esto es que el autor del crimen debe tener requisitoria a juicio firme, por ello presentamos la documentación pertinente y las pequeñas comenzarán a cobrar este beneficio junto con la AUH. Anses está actuando meticulosamente ya que, según nos informaron allí, es el primer caso en Punilla que tramita los beneficios de esta Ley. Se prevé que en febrero o marzo del año que viene se inicie el juicio por esta causa, con jurados popular
ESTUDIO JURÍDICO MURUA Y ASOC. –