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Este lunes por la noche, minutos después de las 22, el vuelo que trasladaba a Edwin Cardona y a sus tres hijos aterrizó en el Aeropuerto de Ezeiza y el ansiado refuerzo de Boca ya está en Argentina. Aunque las valijas y el papeleo tardaron bastante más de lo esperado, el colombiano dejó sus primeras sensaciones en este regreso al club minutos antes de la medianoche. A pesar de estar agotado después de un largo viaje, con escala en San Pablo incluida, expresó su inmensa alegría en pocas palabras.
«Estoy cansado, reventado, acá con los niños. Pero me siento muy feliz, contento. Dios es grande», aseguró en declaraciones a TyC Sports antes de cargar las valijas y de subirse a una combi del Xeneize, que lo trasladó a un hotel del Microcentro porteño.
La llegada de Cardona.
A pesar de las ganas de Miguel Angel Russo por sumarlo a las prácticas, el técnico tendrá que esperar. Si bien su representante, Lucas Jaramillo, dijo que Edwin está «listo para jugar», está claro que el volante primero deberá hacer la cuarentena obligatoria en el país (además de someterse a los testeos correspondientes por el coronavirus) y recién en dos semanas (14 días) se verá con sus nuevos compañeros, que ya arrancaron con la burbuja sanitaria.
El tiempo pasa rápido, los plazos se achican y la realidad marca que el colombiano tendrá poco tiempo para ponerse a tono en lo futbolístico para la Copa. Porque después de esas dos semanas, ya le quedará apenas una para el reinicio de la Libertadores, el 17 de septiembre ante Libertad. Por lo cual, seguramente, no está disponible para ese arranque ni tampoco para el segundo partido, ante el DIM, siete días después.
La foto de Cardona al comenzar su viaje rumbo a la Argentina. Este lunes llegó al país.
Los números de su primer ciclo en el Xeneize dicen que fueron 40 partidos, nueve goles y cuatro asistencias para quien supo usar la camiseta número 10 de Juan Román Riquelme. Ahora, justamente de la mano de JR, tendrá otra oportunidad. De hecho, llegará a préstamo por 18 meses, pero con una opción de extender su contrato por tres años.
¿En qué posición lo piensa poner Russo? Lo que más le seduce a Miguel es justamente el «perfil riquelmeano» del volante, por lo cual, de alguna forma no lo imagina por las bandas como jugaba con Guillermo Barros Schelotto sino más bien como opción por adentro. Y hasta incluso, en la posición que venía ocupando Carlos Tevez. Después de cumplir con el aislamiento correspondiente, a Edwin lo quieren muy suelto en la cancha.
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