La ministra de Salud, Carla Vizzotti, afirmó que es «inevitable que la variante Ómicron se siga propagando y llegue a la Argentina», y descartó que se implemente la vacunación obligatoria porque consideró que el país tiene una «muy buena» cobertura de vacunación.
Vizzotti aclaró que la expectativa sobre esta nueva variante, que surgió en Sudáfrica y avanza en el hemisferio norte, es que «aumenten los casos pero no las hospitalizaciones y muertes», y dijo que se desconoce si va a llegar a desplazar a la variante dominante Delta.
Respecto a la nueva variante, apuntó que «no se sabe mucho» y contó que «lo primero que se hace es que del laboratorio se secuencia la variante, que informa que tiene 32 mutaciones en la proteína de la espiga, que es donde la vacuna apunta».
La cantidad de mutaciones en la proteína es el doble de la variante Delta y eso es preocupante y genera dudas sobre si es más transmisible, o letal, o si van a llegar a funcionar las vacunas»
La vacunación como único método de protección:
Al descartar la vacunación como una medida obligatoria, la titular de la cartera sanitaria apuntó a avanzar con la vacunación en el país, la que consideró como «muy buena».
«La idea no es hacer obligatoria la vacunación sino avanzar, porque los números son muy buenos en la Argentina, donde se superó el 80% de cobertura de población con una dosis y llegamos al 65% con las dos dosis; en los adolescentes, más del 70% con una y llegamos al 50% con dos; en tanto que entre las niñas y niños entre 3 y 11 años, tenemos 55% con dos dosis», especificó.
En ese marco, sostuvo que «Argentina confía en las vacunas», y señaló que lo que se debe hacer son «acciones para estimular más y acelerarla, como vacunar en recitales, lugares abiertos o ir casa por casa para llegar a marzo con la mayor cantidad de personas con refuerzos».