https://images.pagina12.com.ar/styles/focal_16_9_960x540/public/2020-02/na08fo01.jpg?itok=WSJ767xg
En enero, el saldo de la balanza comercial se ubicó en 1015 millones de dólares, lo cual equivale una fuerte suba en relación a los 373 millones que se registraron el mismo mes de 2019. La mejora no estuvo vinculada a las mayores exportaciones sino a la caída del 16,1 por ciento en las importaciones, producto de la crisis económica. Entre las compras al exterior, el segmento que más cayó fue autos terminados, junto a material eléctrico y porotos de soja. Entre las exportaciones, bajó harina y pellets de soja, aceite de girasol y cebada en grano. Mejoró la colocación de trigo, maíz y carne.
El superávit de la balanza comercial, resultado de la diferencia entre exportaciones e importaciones, es uno de los pocos puntos a favor que la gestión de Alberto Fernández heredó de su predecesora. Sin embargo, ese superávit no es fruto de políticas de mejora de la competitividad, que para Cambiemos se basaron básicamente en la caída de salarios, sino que está ligado directamente a la crisis de la economía local, que impacta a la baja sobre las importaciones. La caída de la demanda afecta a las compras al exterior tanto por el lado de la menor importación de bienes finales como de insumos y bienes de capital, porque las empresas no invierten en aumentar la producción dada la situación de retracción del mercado nacional.
En enero, las exportaciones se ubicaron en 4549 millones de dólares, lo cual implica una baja del 0,8 por ciento en la comparación interanual. Ese resultado se explica en primer lugar por las menores ventas de harina y pellets de soja, que implicó una reducción de las ventas totales en 109 millones de dólares; seguido de aceite de girasol (-50 millones), aviones y otras aeronaves (-49 millones) y cebada (-44 millones). También cayeron las ventas de oro, y camarones y langostinos. En cambio, subieron las colocaciones de trigo (149 millones), maíz (132 millones) y carne bovina (49 millones de dólares).
El sector primario tuvo buen desempeño en enero, con una mejora de las cantidades exportadas del 21,7 por ciento, aunque los precios bajaron un 4,2 por ciento. Las manufacturas de origen industrial cayeron medidas en cantidades un 1,9 por ciento, aunque los precios lo hicieron en un 7,5 por ciento, lo cual terminó siendo decisivo para determinar la merma del 9,3 por ciento.
Las importaciones llegaron a los 3534 millones de dólares, con una baja del 16,1 por ciento en la comparación interanual. La mayor caída se verificó en la compra de porotos de soja, con una merma de 262 millones de dólares. Esa baja se explica por la mejora de la cosecha local, que permitió que las cerealeras se abastezcan en el mercado interno y no vía la compra de insumos a países limítrofes. En tanto, la categoría de reactores nucleares, calderas, máquinas, aparatos y artefactos mecánicos tuvo una baja de 112 millones de dólares y máquinas, aparatos y material eléctrico, de 87 millones de dólares. La compra al exterior de autos terminados y autopartes bajó en 80 millones de dólares.
Según las grandes categorías dentro de las importaciones, los bienes intermedios, que son básicamente insumos industriales, bajaron 18,1 por ciento, mientras que piezas y accesorios para bienes de capital lo hizo en un 15,2 por ciento.
En enero, los principales socios comerciales fueron Brasil, China y Estados Unidos. Las exportaciones a Brasil alcanzaron 697 millones de dólares y las importaciones, 661 millones, con un saldo superavitario de 36 millones de dólares. Las ventas a China sumaron 282 millones de dólares y las importaciones, 750 millones, lo cual implica un déficit de 468 millones de dólares.
[ad_2]
Fuente