La Policía Ambiental del Gobierno de Córdoba recuperó un mono carayá que una vecina encontró en el patio de su casa, en el barrio Villa Azaláis de la capital provincial.
La mujer dio aviso a la Policía de la Provincia que, luego de retirarlo, lo puso a disposición de la repartición ambiental por ser la autoridad competente.
“Al parecer, alguna persona tenía al animal en su casa, se escapó y llegó al patio de esta vecina que fue quien realizó la denuncia”, dijo el jefe de Inspectores de Policía Ambiental, Sebastián López Haber.
Se trata de un macho, de aproximadamente dos meses de edad, que aparenta buen estado de salud. El animal fue trasladado al Proyecto Carayá ubicado en La Cumbre.
“Es el segundo mono que aparece este mes, el primero fue un caí adulto y este un carayá de dos meses. Estas especies son del norte y noreste del país, respectivamente, y sufren el tráfico ilegal”, contó López Haber.
La semana pasada, personal de Policía Ambiental, conjuntamente con la Policía de la Provincia de Córdoba, acudió a un domicilio de la localidad de Monte Cristo para retirar a un mono caí- o capuchino- que tenían ilegalmente. Ese ejemplar también fue trasladado al Proyecto Carayá.
Mono carayá
Es uno de los monos americanos de mayor tamaño. Su pelaje es largo y áspero.
Su zona de distribución es el sur de Brasil, este de Bolivia, gran parte del Paraguay y noreste de Argentina.
La gestación del mono carayá dura alrededor de 6 meses y la única cría nace generalmente en otoño o en invierno. Durante los primeros meses el recién nacido viaja prendido al vientre de su madre y luego a su espalda, hasta que alrededor del año de edad se desplaza por su cuenta.
Los comerciantes de estas especies para poder obtener un ejemplar tienen que matar a la madre y así despegar de su lomo a la cría.
Vías de denuncia por tenencia de fauna silvestre