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La reunión había sido pautada más allá de la discusión por la Ley Impositiva, aunque el contexto de negociaciones luego del tratamiento fallido de la semana pasada le dará ese marco ineludible. Axel Kicillof recibirá a los intendentes -o sus representantes, en algunos casos- de Juntos por el Cambio y así tendrá en persona un tanteo de los posicionamientos de los jefes territoriales opositores, en la previa a su nuevo intento de avanzar con el proyecto. Los alcaldes irán con la idea de acordar y llevarán sus pedidos para ese objetivo.
“No vamos con la intención de confrontar. El está arrancando, está aprendiendo y hay que consensuar. Vamos a escuchar y a llevar nuestra mirada de lo que pensamos desde cada municipio”, dijo a Clarín uno de los intendentes opositores del conurbano, predispuesto a negociar aunque sin dejar de mostrar los dientes: “A él lo votó el 52% de los bonaerenses, es cierto. Y a Juntos por el Cambio el 38%, con 61 intendentes y mayoría en el Senado”.
Ya quedó de manifiesto en estos días de cuestionamientos cruzados, luego de que se cayera la sesión por falta de quórum ante la ausencia de la oposición: en paralelo al proyecto para subir el impuesto Inmobiliario -urbano y rural- e Ingresos Brutos se sucedieron conversaciones por cargos en el Banco Provincia y empresas del Estado. Los intendentes llevarán a la reunión una preocupación extra: los recursos para obras del Fondo de Infraestructura Municipal (FIM), con reparto automático por el Coeficiente Unico de Distribución (CUD). Esa caja había quedado suspendida en la gestión de María Eugenia Vidal.
Como parte del acuerdo por las emergencias ya votadas, el FIM se reimplementará con $2.000 millones para el primer trimestre (unos $800 irán para municipios en poder de Cambiemos) y para el resto del año la negociación quedó atada al tratamiento del Presupuesto. Los intendentes también plantearán qué sucederá con las obras pendientes y en algunos ya adjudicadas de la gestión de Vidal. En la previa hubo un gesto de Kicillof: la marcha atrás con el 20% que intentaba quedarse la Provincia sobre las patentes de los vehículos 2009.
Los alcaldes adelantaron cierta predisposición a darle al Ejecutivo las herramientas legislativas en el inicio de la gestión, pese a que Kicillof apuntó a la gobernadora por la sesión caída y a que Jorge Macri -intendente de Vicente López- quedó con Julio Garro (La Plata) como los exponentes de las posiciones más duras, lo que en la Gobernación atribuyeron a los márgenes económicos más holgados en sus municipios. “Hay que dialogar. No se puede negar la Ley Impositiva porque no se puede negar la posibilidad de gobernar”, había otorgado Gustavo Posse, de San Isidro, integrante de la mesa provincial de Juntos por el Cambio con Vidal, Federico Salvai, Macri, Néstor Grindetti (Lanús), Daniel Salvador (titular de la UCR en el distrito), Maricel Etchecoin por la Coalición Cívica y Roberto Costa y Maximiliano Abad como referentes parlamentarios, entre otros.
El primo del ex presidente salió a disputarle centralidad a Vidal. La mayoría reconoce el liderazgo a la ex mandataria, aunque con matices. “Antes daba órdenes, ahora tiene que consensuar con la mesa”, marcó uno los que le responde.
La exigencia opositora de bajar el 75% de aumento a los contribuyentes de mayor poder adquisitivo se mantiene como el principal punto de discordia. La discusión fina de la ley tendrá otro capítulo este viernes, con una reunión entre Costa, Abad y funcionarios de Kicillof como Carlos Bianco y Teresa García. En el encuentro con los intendentes se colará la discusión -y disparará otras negociaciones informales-, aunque los opositores se enfocarán en la relación entre las provincias y los municipios. “Como intendente espero que podamos empezar a hablar de los temas de gestión. ¿Qué vamos a hacer con la seguridad y con las policías locales? Con las obras, ¿cuáles van a continuar y con qué sentido? En infraestructura escolar, ¿cuál va a ser el aporte de la provincia? Lo mismo para el servicio alimentario”, adelantó a este diario Diego Valenzuela, jefe comunal de Tres de Febrero, uno de los que estará presente. Otros como Garro y Macri, de vacaciones, enviarán representantes.
Kicillof buscará darle sanción al proyecto la semana próxima. Una posibilidad será aprobarlo en Diputados -con mayoría oficialista- con los aspectos principales del texto tal como fue presentado y que en el Senado la oposición modifique algunos puntos -como bajar el tope de 75%- y finalmente la Cámara baja la convierta en ley con los cambios. «Kicillof tiene que llevarse la norma, hay que ver en qué términos», resumió un integrante de la mesa de Juntos por el Cambio.
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