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Un soldado tailandés mató al menos a 20 personas y dejó con heridas de diversa gravedad a otras 31. El ataque comenzó en una base militar al noreste de Tailandia para luego continuar en un centro comercial. El sospechoso, identificado por la policía como Jakrapanth Thomma, transmitió parte de sus movimientos por Facebook. Aún continúa atrincherado con más de una decena de rehenes.
Según informaciones preliminares, el soldado disparó a primeras horas de la tarde contra un comandante y algunos compañeros en una base militar de las afueras de la ciudad. Luego robó un vehículo militar, armas y municiones con las que comenzó a desplazarse. En el trayecto hasta el centro comercial, abrió fuego contra un templo y otros edificios, según medios locales. El ataque se produjo en a ciudad de Nakhon Ratchasima, más conocida como Korat. Se encuentra a unos 250 kilómetros de Bangkok y tiene una población de alrededor de 166.000 habitantes.
Al llegar al centro comercial «Terminal 21» comenzó a disparar indiscriminadamente con un fusil de asalto contra peatones y automóviles. «El agresor usó una metralleta para disparar contra víctimas inocentes. Muchas de ellas murieron o resultaron heridas», explicó un portavoz de la policía, Krissana Pattanacharoen. Después entró en el recinto donde continuó el tiroteo. «Se han producido unos 20 muertos», precisó Kongcheep Tantravanich, portavoz del Ministerio de Defensa.»Las fuerzas de seguridad y los francotiradores están rodeando el Terminal 21″, agregó Tantravanich. El Ministerio de Salud informó que alrededor de 10 personas están hospitalizadas «en estado grave».
Fotos y videos publicados en redes sociales mostraron escenas de pánico durante el tiroteo, con personas huyendo y lo que parecían ser ráfagas de un arma automática. Un testigo que se hallaba en el centro comercial antes del ataque dijo que el lugar se hallaba repleto de clientes.»Hoy había muchísima gente en el centro comercial» dijo el testigo, de 32 años, pero que requirió el anonimato. «Me fui del centro poco antes de que se iniciara el ataque», agregó el hombre.
Mientras desarrollaba el ataque, el militar realizó varias publicaciones con fotos y videos en su perfil de la red social Facebook. «¿Debo rendirme?» y «Nadie puede escapar a la muerte«, fueron algunos de sus comentarios. En uno de los vídeos, podía verse al hombre con un casco y uniforme militar manejando el jeep y diciendo estar cansado. «Ya no puedo apoyar más mi dedo», decía al imitar un gatillo con su mano. Horas más tarde Facebook cerró su perfil en la red social.
Además de los disparos, en el centro de compras hubo una fuerte explosión y un incendio, aparentemente debido a un impacto de bala sobre una garrafa de gas. Fuerzas especiales y de seguridad rodearon el edificio y establecieron un perímetro de dos kilómetros para tratar de atrapar al atacante. También llevaron a su madre hasta al lugar para intentar su rendición. Unas seis horas después de que el asaltante ingresara a Terminal 21, los cuerpos de élite lograron entrar y controlar parte del recinto. Mientras tanto decenas de personas que estaban atrapadas y escondidas allí fueron evacuadas, según las imágenes difundidas por las cadenas locales.
Las fuerzas de seguridad urgieron a los clientes a «levantar sus manos» e identificarse. La policía temía que el agresor pudiera intentar esconderse entre los clientes evacuados. «Se han producido unos 20 muertos», precisó Kongcheep Tantravanich, portavoz del Ministerio de Defensa. La policía afirmó que habían asegurado el centro comercial, pero no brindó detalles sobre el tirador, al que describió como un soldado enojado por una disputa por tierras. El ministro de Salud, Anutin Charnvirakul, precisó que no quedaban más cuerpos en el interior del edificio, aunque dijo no saber si había más heridos o muertos. También informó que un médico recibió un disparo mientras ayudaba a un herido.
El vocero del Ministerio de Defensa indicó en declaraciones a periodistas que las autoridades desconocen las razones del ataque. El portavoz de Defensa manifestó que el soldado simplemente se volvió loco. Sin embargo, en los comentarios de Facebook, que luego fueron borrados, el supuesto asaltante hablaba de una venganza contra el cuerpo militar.
Otro caso causó un gran revuelo en Tailandia el mes pasado, cuando un ladrón enmascarado robó en una joyería y mató a tres personas, incluyendo a un niño de dos años. A finales del pasado año, se produjeron varios tiroteos en tribunales, que pusieron de actualidad el debate sobre el gran número de armas de fuego que circulan en ese país del sureste asiático. Tailandia es uno de los países con mayor número de armas en el planeta, con más de 10 millones entre legales e ilegales. Se estima que 15 de cada 100 personas portan armas, según la organización Gun Policy.
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